El invicto asiático defendió los cuatro cinturones supergallo en Las Vegas y sumó su trigésima victoria consecutiva.El estadounidense le puso las cosas difíciles en los primeros rounds, en los cuales incluso llegó a derribarlo.Sin embargo, el actual monarca pudo recuperarse, mostró todo su potencial y aseguró el triunfo cuando el árbitro detuvo la pelea en el octavo asalto.